la policia nacional y la familia nicaraguense

“Que hacemos nosotros por nuestro país”

Creo que parafraseando al gran presidente norteamericano John F. Kennedy, nos podríamos preguntar nosotros que hacemos en Nicaragua para evitar estos cavernícolas enfrentamiento de un lado y del otro, en medio de las calles. Exponiendo a niños, ancianos, minusvalidos y valetudinarios que por estar en un lugar, donde talvez solicitan una ayuda para medio comer, y sobrevivir, son victimas de piedras, morteros, garrotazos y pólvora venidas de uno y otro lado.

Que hacemos por hacer campañas políticas que no inciten a la violencia y violan los derechos de ciudadanos que no estamos envueltos en una politiquería barata y vulgar. Don en los canales de televisión y diarios vemos entrevistas con los “padres de la patria” que con soecidad, malacrianza, con palabras irrepetibles en un medio de comunicación, ya sea radio o t.v. y escrita llaman a “una nicaragua DEMOCRATICA” cuando hacen sus “marchas pacificas,” y van dispuestos tanto unos como otros a recoger desde una piedra hasta una rama, o un hueso como en la “Odisea 2001”, un primate atacando a otro. Y medio de ellos un cuerpo policial resguardando a como puede, a esta marabunta de trogloditas y chimalpopocas, vestidos unos de jeans y camisetas y tatuajes del mercado informal, y otros de jeans y camisetas pero de “marca”, compradas en Galerías y tatuados en AK -47. Dirigidos por “lideres” que situados en las partes sombreadas de las aceras o detrás de sus vehículos, mas baratos para no dañar los caros. Otros en los destartalados buses sin nombres, en “calles sin nombres”. Arremeten contra los únicos que están por un deber: SALVAGUARDAR la vida de unos y otros. Ellos también son agredidos y también son insultados y también han sido heridos y muertos por estas expresiones “políticas” de los “democratizadores” y los del “partido”..., quien responde por los heridos de la policía, por los familiares de policías muertos en función del deber. Policías con un sueldo que no ha sido cambiado desde hace varias devaluaciones. Y que están cumpliendo no ha un partido, como sugieren algunos, sino a una constitución, como bien dice la ley.


En verdad es una pena como estamos quedando ante el mundo, y ante nosotros mismos, vecinos, pobladores del mismo barrio, donde probablemente también vive uno de estos policías. Y no hacemos nada para detener esta escalada de violencia en la familia nicaragüense. Y hay quien se atreve a decir que no están cumpliendo con la ley 510, solo porque no hacen lo que ellos quieren: EL CAOS.


MARIANO MARIN
HISTORIADOR- CINEASTA