transporte en ometepe

Tendría unos diez años cuando viajaba con mi padre, saliendo por el puerto El Fuertecito, en Granada, para llegar a la isla de Ometepe y gozar de mis ansiadas vacaciones escolares. Llegábamos a la isla y después de mil peripecias y bajadas de valijas partíamos a lomo de caballo, de Puerto de Gracias hacia mi finca. Al día siguiente, salíamos de la finca en San José del Norte a las playas de San Silvestre y La Primavera para poder disfrutar la mayor parte del día de verano. El camino, era el mismo camino real que va dándole la vuelta al Choncosiguatepetl (Concepción) para unir a Moyogalpa y Altagracia por el lado norte. En esos días, a lo sumo habría unos dos o tres vehículos en toda la isla, más los de la tabacalera que entraban en temporada de cosecha del tabaco. Pasaba por varias fincas y caseríos donde siempre había un saludo y una alegre merienda. El aire puro y la brisa lacustre enriquecían la vacación. No había prisa, ni angustia.

Pero los tiempos cambiaron y la necesidad de utilizar menos tiempo en viaje se volvió una preocupación. Entraron más vehículos y vinieron más gentes y las vacaciones del turismo nacional. Con la reconstrucción del puerto de San Jorge y la desmantelada pero al fin accesible carretera para Rivas, se empezó a evitar el viaje por Granada. Entonces los viajes se volvieron mas comerciales y menos de vacaciones. La economía de la isla se empezó a mover por el lado de Moyogalpa y no por Altagracia, pues el comercio se hacia directamente a Managua y no pasaba por Granada.

Para algunos de los visitantes extranjeros, sin embargo, aun utilizan el barco de Granada, por el bello paisaje que se va denotando al cruzar todo el costado oeste del lago, Las Isletas, Zapatera, Los dos volcanes, etc... Pero la mayoría viajamos por costumbre por San Jorge. Después de la famosa hora y pico de viaje entre San Jorge y la isla, se tiene la sensación de estar en el paraíso soñado por los mahometanos, o los cristianos, o los budistas, todo es calma y paz. Paz que solo es interrumpida, al llegar, por el ruido y los gritos de los buseros y vendedores de ofertas hoteleras o de chiberias. Tomar el bus hacia Altagracia, que son unos Si no se logra tomar el bus que va a Altagracia, Mérida o Balgüe o si se quiere viajar más cómodo pues, están las ofertas de transporte, que si tiene buena suerte logra encontrar a un buen vehiculo, que por solo $ 10.00 o $20.00 dólares, Sí!! No entendió mal, diez o veinte "dolaritos", lo lleva a un hotel o un pueblo cercano. Porque si es al otro cerro, allí si que se fregó, pues los precios llegan hasta $40.00 o 50.00 Dls., un viaje a San José, Costa Rica desde Granada cuesta $ 22.00 Dls. A San Pedro Sula, Honduras $ 33.00. Si revisamos la distancia existe un desfase de varios “kilometritos”. Quien regula esto? Hasta donde yo sé, nadie. Hay cámaras de turismo, hay una alcaldía, o mejor, hay dos, policía de transito y demás, pero nadie se pone a controlar esto. Y que me digan los usuarios como es el viaje.

El bus, o lo que sea, se detiene en cualquier parte, el chofer se pone a platicar en media carretera. Las horas de ruta son católicas: salen y llegan “cuando Dios quiere”. Y como lo decía en el artículo anterior, los días Domingo peor. Los buses descansan. Y los "microbusitos" y "jeepitos" cobran más. Y como uno debe tomar, el ya famoso ferry, pues paga lo que sea. No se hasta donde la paciencia de los isleños por un lado, y de los comerciantes por otro. Además del rubro actual más importante para la isla: el turismo, podrá aguantar esta zanganada? Porque de seguir así, creo que nuestro paraíso de paz será una zona de guerra de transportistas y usuarios. Y como en las guerras siempre hay victimas en este caso serán: el turismo y los isleños mismos. Pero bueno, a pesar de todo seguiremos viajando a la isla más bella del mundo para gozar de naturaleza de su historia y su arqueología. Ah! Y esto, la Arqueología!!! Querido Wilber, -como decía el cartoon-, esto es otra historia.

MARIANO MARIN

Historiador, Cineasta e Isleño

mmarin55@gmail.com